Está encaminada al estudio de la vida desde todos los puntos de vista: la estructura de los seres vivos y su funcionamiento, desde un aspecto químico (Bioquímica), molecular (Biología Molecular), genético (Genética), celular (Biología Celular) y orgánico (Organografía).
Habilidades requeridas. Buen nivel de autovaloración crítica con valores y principios éticos en conducta, capacidad de liderazgo y gran sentido de observación, de análisis, actitud de permanente búsqueda de nuevos conocimientos, destreza manual y disposición para el trabajo de laboratorio y de campo en forma multidisciplinaria.
Duración de los estudios. Cinco años o diez ciclos académicos.
Grado de bachiller. Requiere haber aprobado los estudios de pregrado, así como la aprobación de un trabajo de investigación y el conocimiento de un idioma extranjero, de preferencia inglés o lengua nativa.
Título profesional. Requiere el grado de bachiller y la aprobación de una tesis o trabajo de suficiencia profesional.
Ámbito ocupacional. El Biólogo se desempeña en centros de investigación y producción, en el sector educativo y en la docencia universitaria, laboratorios especializados, asesoramiento y consultoría en las áreas de recursos naturales, ecología, conservación y biotecnología, en empresas privadas, organismos no gubernamentales; además, trabaja en investigación básica, en programas de salud pública, para el diagnóstico y vigilancia epidemiológica, en la prevención de enfermedades; evaluación de impacto ambiental, como asesor y consultor de organismos sociales y profesionales, como promotor del desarrollo empresarial para ambiente y de la práctica biomédica en la certificación y calidad de especies a nivel de consumo humano, exportación, uso industrial, comercial y otros.
Perfil del egresado. El Biólogo es un profesional científico y competente para comprender a los seres vivientes y sus interrelaciones, centra su quehacer en la investigación básica y aplicada, asociada a la producción desde el hombre, la naturaleza y los fenómenos naturales; lo que lo convierte en un agente de cambio para contribuir a la conservación de los recursos biológicos y al desarrollo sostenible de la región amazónica y del país.