Un fenómeno muy interesante se viene produciendo en el campo de la literatura regional, sea en el campo poético, sea en el narrativo. Nuevos escritores se hacen presentes en la escena literaria, brindándonos sus aportes creativos enriquecedores. Con bastante asiduidad venimos participando de la presentación de obras de muy diversos autores, quienes abordan, de acuerdo con sus preferencias, muchos temas desde su particular visión literaria.

Es el caso de una novel y joven escritora, egresada de la Facultad de Ciencias de la Educación y Humanidades de la UNAP, especialidad de Lengua y Literatura, quien ya se viene haciendo presente en el escenario de la creación literaria, mediante sus aportes en el campo de la narrativa. Me estoy refiriendo a Melissa Mendieta, proveniente del campo magisterial, quien, en ceremonia realizada en los ambientes de la Dirección Desconcentrada del Ministerio de Cultura, Iquitos, nos hizo entrega de la segunda novela de su creación titulada “El diario de Raquel”. Esta obra continúa el proceso creativo de Melissa, pues antes publicó el relato “A un paso del cielo”, inspirado en un incidente al cual sobrevivió y el cuento “Lágrimas de Margarita”; asimismo, había publicado su primera novela “Raquel y Alexander”.

Con “El diario de Raquel” prosigue su incursión por el mundo juvenil, por el mundo de los jóvenes que están aprendiendo y comprendiendo la dinámica de la vida social, con todas sus vicisitudes, sus sorprendentes acontecimientos, sus cuitas y alegrías. Entra a ese mundo que todos creemos entender por haber pasado por él, pero que en realidad está en constante renovación, escapándose de los intentos de los adultos por entenderlo a cabalidad. Y es que cada sociedad y tiempo genera su propia juventud, con su propia forma de ser, con sus propias incidencias, sus propios sueños, sus propios paradigmas comportamentales, irrepetibles a través del tiempo. Es ese mundo siempre nuevo, sorprendente, el que ella aborda, seguramente por su condición de docente en una institución educativa de Iquitos.

La profesora Marina Díaz Guzmán, presentadora de dicha obra, expresó a su autora sus felicitaciones por el aporte que, pese a su juventud, viene entregándonos para motivar nuestras reflexiones respecto a ese segmento etario tan proficuo en sueños y conflictos, por el cual todos hemos pasado.

Por mi parte, yo quiero expresar a Melissa que tenemos en ella tanto una realidad como una promesa para el enriquecimiento de nuestra literatura amazónica. Un paradigma de profesora dedicada tanto a su profesión como a su desarrollo personal, que redunda en un aporte referencial para los docentes y para la juventud, que necesitan de personalidades dedicadas al desarrollo de actitudes superiores, de valores de entrega personal, de lucidez en la búsqueda de propósitos de trascendencia social. De responsabilidad y compromiso con nuestra profesión.

Sí, en especial para los adolescentes, cuya mirada perspicaz se dirige al comportamiento cotidiano de las personas a las que toman como referentes, entre las cuales se encuentran sus profesores con quienes departen intimidades, no necesariamente con palabras sino también con gestos, actitudes, signos de comunicación interindividual.

Por ello es que nos atrevemos a decir: ¡Vamos, Melissa! Esperamos tus obras para seguir disfrutando de tu creatividad.

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